Mi hijo de 8 años le apasiona el mundo del coleo, a mi realmente no me gusta mucho ese deporte, pero como todo niño siempre quieren ser el reflejo de sus padres; y pues luchando con mis miedos internos me toce ser mas flexible, primero porque es lo que le gusta a él y segundo porque es un varón y debe hacer cosas un poco mas rudas. Así que como dice un dicho si no puedes contra tu enemigo únete.
Desde muy pequeño le gustaba ver como su papa montaba, y a medida que fue creciendo fue mostrando el amor por los caballos; Su primera yegua llamada "Blanca Nieves" la tuvo a los 4 años y le fascinaba, sonreía entre nervios y felicidad y le encantaba.
Blanca Nieves y mi hijo
A medida que fue creciendo, fue mostrando mayor dominio sobre el lomo de estos majestuosos animales; Fue entonces cuando llego cumplió 6 años su nueva yegua "Agua Santa" En ella aprendió a galopar, a cruzar y regresar en el galope, perseguir un becerro, y ya comenzaba a ir a cabalgatas con y sin su padre, y hasta llego a participar en su primer coleo.
ya a sus 8 años tiene una nueva yegua llamada "la Panadera" en ella se adentra mas al mundo del coleo, ya que es una veterana en este deporte con un poco mas de 14 años de edad a participado en varios campeonatos, y aunque muchos no lo crean, No solo el hombre enseña a los animales; Ellos también lo hacen; En este caso esta bella yegua le esta enseñando a mi hijo nuevas cosas; porque hay mucho que aprender de estos nobles animales.
Ella es la que se acerca hasta el maute y lo persigue, y no lo pasa hasta que ya tiene el jinete la cola, ya mi hijo aprendió a apartarse en su lomo (echarse de lado con la cola en la mano), también a recolear (agarrar la cola del toro) Esta noble veterana sera la que participara con el en las nuevas competencias, ya que hacen un buen dúo.
Aprendiendo de los caballos...
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